Gala es todo un caso, cualquier persona que la conozca tan solo un poco o haya escuchado los rumores lo sabe. Aunque por lo general está tranquila y prefiere no sociabilizar con nadie, es bien sabido que tiene problemas para controlar y lidiar con las emociones, tanto las ajenas como las propias, además de entenderlas.

Gala se vuelve rápidamente una persona muy explosiva, tiene problemas para controlar sus arranques de ira, siendo éstos extremadamente peligrosos, es muy impulsiva y no piensa las cosas dos veces antes de hacerlas, tomando muchos riesgos innecesarios. Y así como puede sucumbir de manera muy exagerada ante un montón de emociones, de repente se puede volver todo nulo.

La peliblanca no confía en nadie aparte de su hermano y su familia. Aunque ya no tiene problemas para hablar con las personas, no significa que lo haga de buena forma y que con eso entregue confianza. Tampoco pretende todo el tiempo estar atacando a la gente y haciendo daño, pero es lo que le sale la mayoría del tiempo porque realmente tiene cero control sobre lo que siente.

Puede llegar a ser muy dramática y exagerada cuando desea obtener atención, aunque nuevamente, no es algo que haga de manera intencional.

La mayoría de su personalidad se base en todos los trastornos de personalidad que tiene, algunos siendo muy contradictorios con los otros.

Aunque tenga las mejores intenciones del mundo, por lo general las cosas le terminan saliendo pésimo, y luego se arrepiente, sabiendo que no hay forma de arreglar lo que sea que haya hecho en el momento.

Poco le importa lo que le pase a ella misma, hacerse daño, pasar malos ratos, entre otros, no le importan demasiado, las cosas se ponen realmente feas cuando su familia sale en el tema, pues la chica no mide las consecuencias de sus acciones. Por eso mismo prefiere mantenerlos alejados de cualquier otro drama que pueda tener fuera de casa.

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Gala es una chica alta, delgada y de buen cuerpo. Es muy pálida y tiene unos brillantes ojos morados. Su cabello es blanco y no se lo ha cortado en toda su vida, por lo que le llega apenas por arriba de las rodillas. Usa ropas de colores oscuros, y siempre tiene una mala cara, nunca habla con nadie, y siempre da la espalda si se acercan.

Es muy elegante para moverse, y pareciera ser tremendamente frágil hasta que abre la boca. Nunca la verás muy arreglada, aunque si usa ropas bonitas, no se esfuerza en ponerse mucho maquillaje si es nada, además de no necesitarlo, pues tiene muy bonitos rasgos.

Forma de Raza:

En su forma de raza su cabello se alarga hasta el piso, una corona de plumas de color negro con tonos azulados y ligeramente púrpuras recorren su cabeza. Su cabello por la parte interna toma un intenso y brillante color azul que termina en un hermosa agua marina. Si te dijas lo suficiente, casi pareciera que puedes ver galaxias reflejadas en él.

Lo más interesante es que la chica no tiene alas como tal. Detrás de ella se alzan cinco "objetos". Al centro y apuntando hacia abajo es una lanza de un brillante color dorado. Y a cada lado, lo que parecen ser dos espadas. Aquellas representan sus alas, aunque claramente carece de ellas y no son lo que le permiten volar.

Gala es la hija mayor de una gran familia, fue la primera en nacer apenas una hora antes que su hermano mellizo Leo. Sus padres entregaron todo por ellos, los amaban con sus vidas, y no había mucho que decir al respecto, era una hermosa familia.

Los problemas comenzaron cuando los pequeños entraron al colegio. Mientras que Leo era muy sociable, Gala prefería sentarse en un rincón y mirar las nubes, o quedarse en la sala rayando hojas y cosas por el estilo. Aunque los profesores advirtieron de la extraña conducta de Gala, sus padres insistieron en que estaba bien, que probablemente sólo era muy distinta a su hermano, pues en casa jamás mostraba esos problemas, y juraban que poco a poco la pequeña iría ganado confianza.

Obviamente cometieron un error y la pequeña nunca cambió, pero como no le causaba problemas a nadie, nunca se volvió a insistir con el tema. Cuando los mellizos tenían diez años, nacieron unos hermosos gemelos, quienes recibieron casi toda la atención de la chica, Gala llegaba de clases a pasar tiempo con sus pequeños hermanos, y dos años después, unas gemelas también se unieron a la familia. Dejando de ser una familia tan pequeña.

Los verdaderos problemas empezaron cuando la albina cumplió catorce años. O más bien fue cuando comenzaron a hacerse más evidentes. Pues una cosa era que Gala no fuese sociable, que desconfiase de la personas a pesar de que nunca tuvo motivos para hacerlo, pero todo comenzó a complementarse con arranques de ira, inestabilidad emocional, cambios de humor, impulsividad, entre otros. No entendía a las personas, y sólo se apegaba a Leo, quien parecía ser el único que podía aguantarla.

Los arranques comenzaron a suceder también en casa, los problemas de la chica se seguían expandiendo sin tener fin. Y luego en las noches cuando se arrepentía de todo lo que había hecho en el día, perdía todo el control y comenzaba a llorar desmesuradamente y a gritar.

Fue entonces cuando sus padres decidieron llevarla a un psicólogo, donde fue derivada varias veces. Cuando le informaron que tenía Trastorno límite de la personalidad además de Trastorno esquizotípico de la personalidad se les vino el mundo abajo. Aunque creían que habían hecho lo mejor para ella, no habían logrado darse cuenta antes de que algo estaba mal. Gala en cambio pareció no tener reacción.

Aunque por dentro fue muy distinto. Sabía que algo andaba mal con ella, y ponerle un nombre hizo las cosas mucho más fáciles. Si bien la mayoría del tiempo no podía controlarse, buscó formas de no descargar toda esa basura innecesaria en los hombros de su familia, menos aún que sus hermanos pequeños la viesen así. Sabía que se preocupaban, y no quería eso, realmente no.

Fue entonces cuando comenzaron las salidas. Comenzó a salir, a buscar problemas y hacer escándalos en otros lados. Llegando a estar a veces tres días sin llegar a casa, aunque siempre manteníendose en contacto con su familia, diciendo que estaba en casa de una amiga... Gala sabía que Leo respaldaba cualquier información que ella daba, y al final era con él con quién más se comunicaba.

Pero luego al llegar a casa, se daba cuenta de que lo estaba haciendo peor. Pero las salidas y las locuras que estaba haciendo le hacían olvidarse de que no era normal, de que estaba más cagada de lo que cualquiera pudiese pensar. Y terminó por volverse un círculo vicioso, en donde salía para sentirse mejor consigo misma, bajo la excusa de no preocupar a su familia, y luego volvía sólo para darse cuenta de que estaba empeorando las cosas.

Y como si no fuese suficiente, luego le detectaron otro problema, en donde, contradictoriamente a sus otros transtornos, buscaba llamar la atención. Trastorno Histríonico de la Personalidad. Descrito como personas que actúan de manera muy emocional y dramáticas para atraer la atención hacia ellas. Vaya, como si las cosas no pudiesen ser peores.

Poca si es que no nada de mejoría tuvo la chica con los años. Al menos siempre contaba con su hermano, por lo que entre ellos dos hacían todo lo que podían para ayudarse el uno al otro. Gala no podría estar más agradecida de la familia que tenía, y se sentía constantemente culpable de ser la falla y la decepción en ella.

El día del evento fue solamente porque Leo le rogó que lo acompañase, que le haría bien. No, ella no quería estar en un evento enorme, rodeada de gente, cualquier cosa podría pasar. Y así fue. Debió ser ella la que le rogase a su hermanito el quedarse en casa.

Cuando la bomba explotó, escuchó mil voces atormentar su cabeza, donde resaltaban las de su familia, recalcándole lo pésima hija que era, el daño que les hacía. Y sentía en su cuerpo miles de pinchazos, y dolor en cada una de sus venas. Eligió un serafín, porque quería ser buena, quería aquella parte de ellos, pero sabía que jamás podría serlo.

Despertó junto a su hermano, quien la miraba asustado e inmediatamente la abrazó cuando abrió los ojos. No se calentó la cabeza tratando de pensar y entender todo lo que había pasado.

Al inicio fue difícil, no se separaban por nada del mundo, conseguir comida y agua era lo peor, además de tratar de sobrevivir. Nunca quiso buscar la manta, pues temía demasiado que fuese falsa y aquello afectase su familia. Logró tomar un auto junto con Leo en el estacionamiento, aunque la chica estaba aterrorizada ante la idea de poder dañar a su familia por la ligera cooperación que tenían con los híbridos ahora. Pero al menos podía proteger a Leo en las noches de Luna Llena.

Gracias al cielo las cosas se facilitaron cuando recibieron los espejos. Para Gala, saber qe su familia estaba bien era lo más importante, y lo que le dio motivación para seguir adelante.

❆ Le gustan las cosas dulces.
❆ Le gusta mucho salir, comenzó a emborrachase y fumar desde una temprana edad.
❆ Lo que más le importa en la vida es su familia.
❆ Nunca ha tenido parejas o amigos como tal.
❆ La única persona en la que confía plenamente es Leo.
❆ Haría lo que fuese por proteger a un ser querido.
❆ Su único deseo desde pequeña ha sido sanarse de sus problemas. De niña, a Papá Noel le pedía que le curase su enfermedad.
❆ No le gusta amarrarse el cabello.