¿Qué se puede saber de un chico con ese rostro?

Agresivo sería la primera palabra al momento de ver el rostro de este chico pasar por la calle, otras más sería violento, delincuente, desordenado, impaciente... bueno, la mayoría de estos argumentos son ciertos, y nadie lo puede negar, ni siquiera este adolescente, pero no negarlo no es igual a que esas sean las características que tiene este personaje en específico.

Este chico es más agresivo y arrogante con todo aquel que le mira mal, y eso ya se puede saber que escaso es el número de personas. Teniendo una actitud explosiva e impulsiva, la combinación de estas dos características en su personalidad es bastante volátil, en un cóctel que, para su energía y la fuerza que lleva sería algo caótico.

Las palabras no le importan en absoluto, no dejan que le afecte las voces que le juzgan, son las acciones las cuales tiran del seguro de una granada y de ahí en adelante es algo predecible lo que va a hacer. Tampoco su forma de hablar es la mejor, se mantiene honestamente agresivo y de palabras cortantes, que realmente la falta de importancia de la reacción de los demás es un punto crucial. Su lengua es filosa, al igual que sus acciones, si alguien le desagrada se lo dice en la cara, si alguien llega y eso se queda corta por su dura mirada, pero si se pasa más allá de aquellas actitudes entonces se encontrarán algo más...

Y aún con esto dicho no es una persona malvada, maléfica ni mucho menos mala, es tan solo la percepción que tienen los demás al momento de verlo. Aunque es honesto y duro se restringe de palabras malintencionadas o como algunos le dicen “groserías” hasta cierto punto, también a pesar de su constitución no es alguien abusivo, es más, detesta profundamente el abuso a los débiles, que ante todo lo que él puede hacer es defenderlos, meterse en peleas para librar a los abusados, que las acciones de este adolescente dicen más que mil palabras, y aquellos que se topan frente a sus puños es porque realmente se lo haya merecido, y que aunque su juicio este un poco equivocado debido a algunos malentendidos, pedir una disculpa nunca ha sido una molestia para él, si es que de verdad se da de corazón.

Acompañando este rasgo se encuentra también una persona humilde, no presume de su fuerza, pero es apasionado en lo que hace, como la persona que es y se ha formado a lo largo de los años, este adolescente con las hormonas subidas, liberar sus energías por medio de combate es algo que le ha estado servido, por algo ha estado entrenando como boxeador.

Un corazón noble se carga dentro de todo lo que sería su acto volátil y peligroso, que ayuda a los demás a su manera, que a base del contacto físico agresivo como algunos gritos, más por esa emoción que se junta y explota como un volcán que por la poca paciencia que también anda dentro de él.

Y ante todo esto, al no tener una clase de contacto de un estilo más calmado, suave, cariñoso se ha vuelto una persona que le es difícil expresarlos que no sea euforia, ira, enojo y los que son de similar gama mientras que los contrarios hay dificultad en ellos, tanto de una manera física como de labia, ya que no llega a decir eso sin antes frustrarse, enfurecerse o simplemente hacer algo más para desviar la cantidad inmensurable de energía que gasta en estos... una de las razones por las que no puede tener una amistad que esté dentro de los círculos de sus compañeros al igual que los que andan afuera, raro en su especie como dirían.

⚝

En su forma humana es un chico de 18 años de una altura de un metro setenta y seis centímetros, de cabellos cortos y puntiagudos,de un color rubio ceniza, rebeldes como su actitud misma con un flequillo entrecortado que cuelga sobre sus cejas. De una complexión fornida, posee una tez blanca y sus ojos afilados y de un color rojo. Algunas cicatrices se apoderan de su pecho y de su abdomen a causa de las continuas peleas en las que se ha metido tanto dentro del boxeo como afuera de este. En cuanto su estilo de moda, es más apegado a lo que sería un estilo callejero, con los pantalones flojos, las camisas las mantiene desabrochadas de los primeros botones y desfajado.

En su forma de raza sus cabellos andan en un color negro azabache, su cuerpo se descubre de la parte superior, teniendo marcas rojos carmesies que pasan por arriba de su oreja hasta abajo de sus ojos, al igual que se extienden dos marcas por cada hombro hasta llegar a sus pectorales; en su frente se mantiene un símbolo de fuego del mismo color que las marcas. Sus pies andan levitando, y en lugar de eso está parado en lo que parece ser esferas de fuego los cuales solamente están separados a unos cuantos milímetros del suelo.

Conforme utiliza sus poderes las marcas junto con el símbolo en su frente y sus cabellos comienzan a intensificarse, este último tornando a un color rojo brillante.

Nacido en el seno de una familia de clase media, con una madre rusa y un padre estadounidense en Japón. La combinación más extraña de diferentes partes del mundo como han de decir, pero era algo esperado debido a las circunstancias de su trabajo, y entrar en detalles es algo insignificante… solamente podemos decir que una cadena de circunstancias afortunadas desataron una relación cómo está.

Fueron los primeros diez años de su vida dentro de este país, rodeado por una cultura que ya había tomado como suya, y aún así con la influencia de su padre y su madre había llegado a ser un chico bueno para los idiomas. Con principios en los cuales esencialmente era “es fuerte si puedes protegerte, pero aún más si proteges a los demás” y ahí fue su objetivo fue volverse pronto y no tardó en entrar a diferentes deportes. Desde kendo hasta natación, basquetbol, beisbol, y antes de poder decidirse se fueron a Inglaterra.

Era un lugar extraño.

Diferente cultura, un choque que realmente no estaba preparado, y recibió lo duro que era ser el extranjero. El primer año y parte del segundo las burlas llegaron, después los abusos de los compañeros de clase por su acento, por como se mostraba respetuoso ante las clases, los profesores, los demás compañeros, de que en ciertas ocasiones los honoríficos que se utilizaban salían de una manera natural, educada que los chicos rebeldes no les gustaba.

No fue hasta la segunda mitad del segundo año en donde se metió al boxeo, deporte el cual se iba a quedar en definitiva. Se fue adaptando a su manera en la vida escolar y social, respondiendo a las agresiones y a los insultos con una actitud agresiva, violenta, con golpes. Y junto a esto los problemas siempre llegaban a los oídos de sus padres, más su madre quien iba por la iniciativa que su padre, y aunque lo defendía en su forma de adaptarse no faltaron los regaños y castigos.

A todo esto, la relación familiar era normal en lo que cabe, amorosa en cierto sentido de la palabra, siendo que el padre tomó un rol más pasivo a comparación de los jefes de familia, que resolvía más de una forma democrática y civilizada los problemas que se enfrentaban mientras que la madre estaba más pegada a la acción, intimidación y con una lengua de plata completamente filosa y unos ojos los cuales podían disparar.

Después de probar aguas por unos años, se llegó a acuerdo de meter a su hijo en Fallgate, y de ahí fue solamente una constante de peleas, creando una reputación bastante mala para lo que realmente era el chico, pero no se quejó ni un solo segundo, en lugar de eso lo aceptaba, así aprovechando lo que los demás creían y pudiendo ayudar a su manera a los demás.

Prosiguiendo hasta el día del festival, se le dio la tarea de ayudar a los demás puestos, cargar cosas, moverse de un lado a otro, y aunque no tenía interés en participar activamente en los eventos ni en las festividades, nunca se negaba a estar como asistente tras bambalinas.

Pero así fue donde se encontraba cuando explotó la bomba, cuando sus oídos pitaron, sus ojos se cegaron, por un momento no sabía en dónde estaba, en otro momento llegó a elegir algo, brillante, poderoso que iluminaba su camino. En otro momento se despertó de un sueño, y pasó de la oscuridad a ver su escuela en malas condiciones y una batalla caótica enfrente de él. El fuego lo rodeaba y de lo contrario a lo que los demás podrían pensar de Zack, controló las llamas para dar paso seguro a los que se encontraban indefensos.

Los primeros días fueron rudos, violentos y pesados, y su vida había sido terminada una vez por ayudar a alguien, y varias veces más siendo traicionado, pero al final de las cosas, estaba con los suyos, ayudando en como pueda.

Le encantan los perros.

Los dulces picantes son sus favoritos.

Por unos años practicó la batería.

No ha tomado, ni fumado, se ha mantenido limpio gracias a las enseñanzas de su maestro.

Aunque no lo logre admitir, le gusta estar con gente.